Skee Mask

A propósito de

Skee Mask no solo hace música; está creando ecosistemas sónicos. El productor con sede en Múnich, cuyo nombre real es Bryan Müller, emergió del terreno fértil de la música electrónica alemana para convertirse en una figura clave en la expansión de los límites del IDM, el techno y el jungle. Su sonido, un tapiz complejo tejido con intrincados patrones de batería, exuberantes texturas ambientales y guiños a los sonidos rave clásicos, evita la categorización fácil. Si bien los primeros lanzamientos se inclinaron fuertemente hacia el dub techno y el breakbeat atmosférico, su álbum revelación, "Compro" (2018), solidificó su reputación como maestro del detalle y la atmósfera, ganando elogios de la crítica por su mezcla de energía bruta y diseño de sonido refinado. La trayectoria de Müller, desde clubes underground hasta festivales internacionales, demuestra su creciente influencia. No es de los que se autopromocionan, dejando que la música hable por sí sola, lo que solo aumenta su aura de misterio. Es un habitual de Ilian Tape, el sello que ha nutrido su visión única. Los proyectos recientes muestran una evolución continua, incorporando elementos de electro y un diseño de sonido más experimental, sin perder la firma sonora de Skee Mask. Demuestra una y otra vez que la música de baile inteligente puede ser a la vez cerebral y profundamente atractiva.