Suki Waterhouse no es simplemente otra modelo convertida en música; es una maestra de la nostalgia atmosférica, creando un sonido que se siente a la vez atemporal y dolorosamente contemporáneo. Cambiando las pasarelas por melodías cautivadoras, Waterhouse ofrece un paisaje sonoro dream-pop brumoso, infundido con elementos del encanto de los grupos de chicas de los años 60 y la vulnerabilidad cruda del indie rock. Su música, empapada de reverberación y armonías melancólicas, evoca comparaciones con Mazzy Star y Lana Del Rey, pero posee una respiración distinta que es totalmente suya. Waterhouse inicialmente ganó prominencia como modelo y actriz, pero sus ambiciones musicales siempre ardieron a fuego lento en segundo plano. Su primer sencillo oficial, "Brutally", mostró su destreza como compositora y su voz etérea, preparando el escenario para una floreciente carrera musical. El álbum "I Can't Let Go" de 2022 solidificó su transición, ganando elogios de la crítica por sus letras introspectivas y su exuberante producción. Lanzamientos recientes, como "OMG", continúan explorando temas de amor, pérdida e identidad con una nueva confianza y una experimentación sonora creciente. Con cada lanzamiento, Suki Waterhouse consolida su posición como una artista multifacética, capaz no solo de cautivar visualmente, sino también de crear música que resuena profundamente con los oyentes, cimentando así su lugar en la escena musical independiente.