Lesram no solo rapea; disecciona el alma de la *banlieue*, línea por línea, con una precisión quirúrgica que es a la vez brutal y hermosa. Emergiendo del vibrante, a menudo volátil, paisaje del 93, Lesram crea un sonido que es una potente mezcla de sensibilidades *boom-bap* clásicas filtradas a través de una lente moderna e introspectiva. Su música no se trata de estribillos que encabezan las listas; se trata del realismo crudo y los complejos esquemas de rimas que exigen escuchas repetidas. Sus primeros *mixtapes* sentaron las bases, pero su aparición en el centro de atención se produjo con proyectos como "Gros Lard", que muestran su destreza lírica y su voluntad de abordar verdades incómodas. La influencia de leyendas como Nas y Mobb Deep es evidente, pero Lesram forja su propio camino, caracterizado por sus narrativas austeras y su honestidad inquebrantable. Es un narrador ante todo, que documenta la vida al margen con una intensidad poética raramente vista. Sus colaboraciones, a menudo con otras estrellas en ascenso de la escena del rap francés, demuestran su compromiso de elevar todo el género. Si bien su trayectoria aún se está desarrollando, Lesram se está posicionando como una voz vital, un cronista de su generación y una fuerza a tener en cuenta en el hip-hop francés. Continúa lanzando sencillos y actuando en vivo, construyendo constantemente una base de seguidores leales atraídos por su voz auténtica y su visión intransigente.