Klô Pelgag no es solo una música; es una arquitecta sónica, construyendo paisajes sonoros vibrantes, a veces inquietantes, a partir de la base de la canción quebequense. Armada con una voz distintiva y una inclinación por lo teatral, Pelgag crea arreglos complejos que desafían la categorización fácil. Piénsela como un caleidoscopio roto y reensamblado en un retrato deslumbrante, ligeramente descentrado, de la vida moderna. Su música se inspira en el art-pop, el pop barroco y una buena dosis de vanguardia, creando un sonido que es a la vez familiar y sorprendentemente original. "L'Alchimie des monstres" en 2016 consolidó su estatus como una fuerza importante, ganándole elogios de la crítica y reforzando su reputación de experimentación audaz. La trayectoria de Pelgag ha estado marcada por la voluntad de abrazar lo inesperado, sus actuaciones en vivo a menudo incorporan disfraces elaborados y una puesta en escena teatral. Este compromiso con una visión artística la distingue de sus contemporáneos. El impacto de Pelgag se extiende más allá del simple entretenimiento. Se ha convertido en una voz para una generación que lidia con la identidad, la ansiedad y las complejidades del mundo moderno. Sus trabajos recientes continúan superando los límites, explorando nuevos territorios sónicos mientras conservan los elementos centrales que hacen que su música sea tan cautivadora. Es un talento singular, en constante evolución y que se niega a ser definida.